Jala, cuenta con 5586 habitantes. Se encuentra a 1070 metros sobre el nivel del mar y es el municipio del estado de Nayarit que cuenta con la más diversa cantidad de monumentos históricos, entre los que destacan: su templo parroquial, edificado en la segunda mitad del siglo XIX y las ruinas del antiguo hospital con su fachada Barroca.
Caminar por sus calles de forma irregular es introducirse a barrios con sellos característicos que invitan a contemplar viejas casonas de típica arquitectura y sabor añejo.
La Basílica de Jala, es una joya arquitectónica mezcla de estilos romano y gótico, que fue construida con cantera color rosa, verde y amarillo. La primera piedra de este lugar se colocó en abril de 1856.

Existen dos construcciones en ruinas, la primera que fue la iglesia de San Francisco de Asís, edificada en 1674, y la segunda que fue un convento franciscano, clausurado en 1810.
Jala, cuenta con grandes atractivos como el volcán del Ceboruco. Posee paisajes, cerros y caídas de agua que se ubican al norte de la cabecera municipal, donde se observa toda el área urbana.
En esta localidad hay cuatro templos tradicionales que son la basílica lateranense de la Señora de la Asunción; el templo de La Natividad; el templo de San Francisco; y el templo de la comunidad vecina de Jomulco.

Jala, se incorporó al programa de Pueblos Mágicos en el año 2012. El nombre de Jala se deriva del vocablo náhuatl “Xali” que significa arena, y de la variante “Tla”, que hace referencia a “lugar donde abunda”.
Jala fue el primer asentamiento con pobladores de origen náhuatl y fue evangelizado por los frailes de Ahuacatlán. Pasó de pueblo a villa el 5 de febrero de 1918, con la promulgación de la Constitución Política del Estado de Nayarit, quedando integrado como municipio de esta entidad.
Jala se ubica al pie del gigantesco volcán del Ceboruco, desde el cual se puede disfrutar de una espléndida panorámica de todos los poblados cercanos. Es un Pueblo Mágico de calles empedradas y viejas casonas de adobe con techos cubiertos de teja y aquí existe la ancestral tradición de “los curanderos”, que son aquellas personas que se dedican a armonizar tanto la parte física como espiritual, por lo que en caso de que se quiera conocer un poco más esta tradición Jala es una excelente opción.
Se recomienda probar un tejuino, que es una bebida refrescante hecha a base de maíz (fermentado o sin fermentar) que lleva dulce de caña de azúcar o piloncillo y porque no, acompañarla de una gordita de horno recién hecha.
El municipio de Jala se localiza en la parte sur del Estado de Nayarit. Limita al norte con los municipios de Santa María del Oro y La Yesca; al sur con los municipios de Ahuacatlán e Ixtlán del Río.
En el Museo Comunitario de Jala, se exhibe una colección de piezas encontradas en las zonas arqueológicas de la región y se ubica en una casona del siglo XIX.
Otra de las actividades que se pueden hacer en esta localidad es poder caminar hasta el cráter principal del Volcán del Ceboruco y disfrutar del increíble paisaje rodeado de lava volcánica petrificada que recuerda un paisaje lunar. Hay un parque geológico en donde se puede practicar montañismo y ciclismo de montaña, pero para subir al Ceborruco hay que avisar a la Presidencia Municipal. También se pueden visitar la Cascada El Salto que se ubica a solo siete kilómetros de Jala y es un paseo que vale la pena realizar.

Foto: Juan Carlos Muñoz